Los mitos de una mente productiva

Hemos escuchado por mucho tiempo que una persona productiva es aquella que hace muchas cosas con su tiempo. Que se levanta muy temprano y hace como 10 cosas antes de que todos lleguen a la oficina a las 9am. 

Nos llenamos de actividades a lo largo de los días, las semanas y los meses…sin darnos cuenta que la vida pasa y que no estamos viviendo de manera consciente y presente. Terminamos (por las prisas de terminar los pendientes) por no cuestionar mucho nuestro accionar, lo cual nos lleva a estar más en un modo de “avión automático”.

Es un hecho que No hay una fórmula exacta para ser productivos y que cada individuo tiene necesidades específicas en su cuidado físico, emocional y mental. No porque todos somos seres humanos, podemos medirnos con la misma moneda. 

Con el auge del salario emocional y las nuevas perspectivas sobre lo que realmente lleva a un colaborador a ser productivo comenzamos a poner atención a otras variables que influyen en los resultados y que antes no se podían ni nombrar, como lo es:

Tener un propósito claro en nuestro trabajo 

Tener un sentido de pertenencia a la empresa

Sabernos cuidados emocional, física y mentalmente por nuestros líderes 

Sentirnos importantes y reconocidos por lo que aportamos

Tener la oportunidad de ejercer nuestro liderazgo

Por lo tanto olvidémonos de las ideas que dicen que debes de levantarte antes de las 6pm para poder entrar al club de las 5pm y poder ser considerado “productivo”. 

No todas las personas tienen la posibilidad o la fisionomía para levantarse a esa hora, hay personas diurnas y personas nocturnas. Personas que tienen compromisos que les es imposible poder empezar a esas horas y así…podemos enumerar decenas de variables que hacen que cada persona pueda elegir los horarios que mas le acomoden para lograr lo que requiere con su día.

Olvidémonos también que es posible ser “multitask” y hacer todo con calidad. 

Según diversos estudios científicos y el Consejo Nacional de Seguridad de Estados Unidos, entre otros, el cerebro humano es incapaz de llevar a cabo varias tareas simultáneamente, ya que esto disminuye su rendimiento.

Lo que en realidad sucede cuando intentamos hacer varias cosas a la vez, es que nuestro cerebro cambia rápidamente el foco de atención de una tarea a otra, lo que reduce drásticamente la productividad e incrementa la posibilidad de errores.

No por nada, la técnica de respiración consciente es tan efectiva para bajar la ansiedad y regresar al “aquí y el ahora”. El cerebro no puede hacer dos cosas a la vez de manera atenta y consciente.

Por lo tanto las claves que si pueden ayudarnos a ser productivos son las siguientes:

1.-Poner orden al desorden en tu casa, oficina, coche, etc. Tener las cosas desordenadas nos quita mucho tiempo y energía.

2.-Definir objetivos SMART. Lo que no se mide no se puede lograr en tiempo y forma.

3.-Tener un plan y ajustarse a el. es importante poner la atención en una tarea y, cuando se finalice, comenzar con otra.

4.-Delegar. Asumir que no todo lo tenemos que hacer nosotros y que pedir ayuda siempre será una buena opción si sabemos delegar adecuadamente.

5.-Descansar y reconectar. El cerebro necesita tiempos para poder liberar la tensión y poder reconectarse con más fuerza. Toma tus tiempos de regeneración neuronal con un café social entre amigos de la oficina, sal a caminar y escucha tu música preferida, haz una práctica meditativa, come algo que te encante sin devices cerca.

6.-Poner límites y no tomar todo por miedo a decir que no. El que mucho abarca, poco logra, así es que es mejor que midas tus fuerzas a querer lograrlo todo tu solo.

Líderes internacionales como Elon Musk, fundador de Tesla, y Jeff Bezos, de Amazon, han compartido sus rutinas y lo que hacen para ser exitosos y todos le dedican gran parte de su semana a ellos mismos.

Por lo tanto, recuerda que justamente la productividad no se mide en horas sino en resultados obtenidos.

Para más información de herramientas alrededor de ser más productivos sin renunciar al bienestar, no dejes de seguirnos.